En el libro Written on the City, Axel Albin y Josh Camler proponen una división de los graffiti en tres grupos: del ego, estéticos y con mensaje. Acá va el texto traducido y una invitación a recorrer dichas categorías.
Graffiti del ego
Como una campaña de marketing, como un perro meando en las alcantarillas y en los árboles, el graffiti del ego quiere difundir el nombre de su creador en toda la comunidad etiquetando tantas superficies como sea posible. No dice nada más que el nombre, repitiéndose en cada lugar que se lo encuentra. Se trata de mí, no de vos.
(Mirá algunos en Tags.)
Graffiti estéticos
La pieza, la quemadura, el vómito, el mural: este es el graffiti para el consumo estético. Más que cualquier otra cosa, primero es bello. El impulso detrás de esta clase de graffiti es generoso. Es un regalo para los ojos, para el mundo visual que compartimos.
(Mirá algunos en Dibujos.)
Graffiti con mensaje
Destinado a ser leído y accesible para cualquiera que pase, el graffiti con mensaje está tratando de decirte algo. Quienes lo hayan escrito no te conocen, ni vos lo conocés a ellos, y tampoco importa. Es lo que ya se dijo, es el mensaje lo que importa.
(Mirá algunos en Consejos y pedidos.)
Acá va otro clip con fotos de Alejo Tarrío, César Verrier, Natalia Maskin, Nora Guledjian y Sergio Fernández, sacadas en el Segundo Safari Fotográfico de GRaFiTi, que se hizo el domingo 27 de noviembre de 2011, por los barrios de Colegiales y Chacarita.
AMEBA son las siglas de Arte Móvil Experimental Buenos Aires, un grupo de intervenciones urbanas surgido a mediados de 2011 en la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires. En esta conversación por correo electrónico, compartieron sus principios, influencias e ideas.
La Unidad N° 11 del Servicio Penitenciario de Santa Fe está ubicada en la Ruta 14 a diecinueve kilómetros de la Ciudad de Rosario, en la localidad de Piñero. Durante una visita al penal, en un salón donde los chicos estudian, nos encontramos con estos graffiti: intentos de convertir las paredes que los atrapan en un espacio de apertura, y uno de los rincones más coloridos y vivaces en un lugar bastante gris y oscuro.
En las calles de Buenos Aires, empezaron a aparecer afiches publicitarios cuyas caras están cubiertas con pintura. Un gesto simple para crear un efecto extraño. En una conversación por mail, el creador de estas intervenciones, alias RRAA.-, cuenta los orígenes y los porqués de la serie "Desenmascarados".
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