En el libro Written on the City, Axel Albin y Josh Camler proponen una división de los graffiti en tres grupos: del ego, estéticos y con mensaje. Acá va el texto traducido y una invitación a recorrer dichas categorías.
Graffiti del ego
Como una campaña de marketing, como un perro meando en las alcantarillas y en los árboles, el graffiti del ego quiere difundir el nombre de su creador en toda la comunidad etiquetando tantas superficies como sea posible. No dice nada más que el nombre, repitiéndose en cada lugar que se lo encuentra. Se trata de mí, no de vos.
(Mirá algunos en Tags.)
Graffiti estéticos
La pieza, la quemadura, el vómito, el mural: este es el graffiti para el consumo estético. Más que cualquier otra cosa, primero es bello. El impulso detrás de esta clase de graffiti es generoso. Es un regalo para los ojos, para el mundo visual que compartimos.
(Mirá algunos en Dibujos.)
Graffiti con mensaje
Destinado a ser leído y accesible para cualquiera que pase, el graffiti con mensaje está tratando de decirte algo. Quienes lo hayan escrito no te conocen, ni vos lo conocés a ellos, y tampoco importa. Es lo que ya se dijo, es el mensaje lo que importa.
(Mirá algunos en Consejos y pedidos.)
Sigue la saga del baño. Ahora con un poema del escritor brasileño, José Paulo Paes (1926-1998), inspirado en aquel viejo refrán de "en este lugar sagrado". Una reflexión sobre lo que hacemos puertas adentro del toilette.
Los graffiti de baño son un género en sí mismo. Tanto que, en 1969, Robert Reisner hizo en Estados Unidos una compilación llamada Graffiti (Inscripciones en los baños). Dos años después, Ediciones Papiro tradujo y editó en Argentina una versión acotada de aquel libro. Aquí va una selección de grafitis para leer sentado en el trono.
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Muchas gracias.
Pablo Sztulwark (arquitecto, profesor y ensayista) analiza la memoria urbana como un conjunto de fuerzas vivas que "afectan a un objeto o un espacio y lo transforman en lugar". Desde esa perspectiva, cita dos ejemplos (el Puente Pueyrredón, la Plaza del Alma) y señala al graffiti como una forma de construir memoria que desborda los soportes institucionales.
Cortito y al pie: cinco enlaces recomendados para cliquear y ver otros lugares que pueden resultarte inspiradores.