Del infinito mundo de expresiones callejeras, acá van aquellas que preferimos ver y registrar. El sitio está abierto para que lo sigamos construyendo entre todos.
Los que están escritos a mano por una persona, en la calle, a la vista de todos. Aunque también entran los graffiti que están más ocultos, en túneles, estaciones de subte, baños, trenes, colectivos, etc..
Preferimos las manifestaciones personales de amor, bronca, (declaraciones, confesiones, homenajes, etc.), las ideas políticas (no partidarias), la filosofía y el misticismo, las frases ingeniosas, las máximas y los delirios, la poesía, la música, las preguntas, la pasión por el fútbol, las expresiones idiomáticas y, claro que sí, las erratas.
Está todo bien con los graffiti hip hop (tags), los dibujos y los esténciles, pero a la hora de registrar graffiti, privilegiamos los que tienen texto. Igual, GRaFiTi está abierto a que cada cual lo alimente con su expresión callejera preferida.
No nos gustan las frases discriminatorias, ya sean de religiones, razas, nacionalidades, géneros, etc. Ahorremosnós subirlas.
GRaFiTi quiere seguir creciendo como archivo de escritos en la calle, construido colectivamente.
En mayo partió la fotógrafa cordobesa Lucía Seguí. Tuve la suerte de conocerla en el Cineclub de Nono, que funcionaba en su casa. Su amigo Ruben De Noia, mi profesor de arquería, me prestó estas postales de sus graffitis cordobeses de los '80, que escaneé para compartir a modo de homenaje.
Desde 2016, Lean registra y publica pintadas callejeras como comentarios de la actualidad: así hace de una cuenta de Instagram las portadas de un diario "personal" al ritmo de la coyuntura.
En la noche del sábado 4 de julio en Constitución, por Virrey Ceballos al 1200 bajo la autopista, quemaron a una mujer dentro de la precaria casilla en la que vivía. No se logró reconocerla pero dicen que se llamaría Julieta. Un grupo anónimo realizó una acción en el lugar para velarla y ver si se puede restituir su nombre.
Atrás de la firma Desorden, se adivina una mano de mujer que convierte la O de la sílaba central en un corazón y combina el tag personal con letras de canciones ajenas. En calles de Uruguay, Chile, Argentina y en su cuenta de Instagram (@desordensenace), podrás ver sobre vidrios y paredes las múltiples aplicaciones de este tag que también muta traducido a otros idiomas. Es lo que pasa cuando el caos se vuelve sensible.
Nicolás Preci nació en 1983 en Buenos Aires. Es fotógrafo, viajero y autor de "Cacheños", una serie de fotos a gran escala de vecinos de Cachi, que pueden verse en las calles de este pueblo salteño desde hace varios meses.