La cantidad y variedad de fotos que suben cada día personas de distintas partes, hizo que varios medios se interesaran por el proyecto y ayudaran a difundirlo. En las últimas semanas se publicaron notas sobre GRaFiTi en Radar de Página/12, Revista Ñ Digital, Positivos.com (de España) y Wokitoki.org, entre otros.
Radar de Página 12, domingo 2 de enero de 2011
"Lo que pinte" por Mercedes Halfon
Desde aquellos caballos hermosos en carbonilla dibujados en la oscuridad de una caverna en Francia hace miles de años hasta hoy, siempre se ha escrito en paredes. Podría haber una continuidad entre la carbonilla, el marcador y el aerosol, aunque las connotaciones de cada material sean muy distintas. Como sea, ya no es una novedad que en los últimos diez años el graffiti, el street art, el stencil, y todas las demás subactividades pictóricas, vandálicas, juveniles y callejeras, están en auge y expansión. Las razones del fenómeno son diversas. En nuestro país la tendencia ha tomado vigor en las reverberaciones del 2001, cuando ver en la calle el stencil de Bush con las orejitas de Mickey Mouse sobre el slogan Disney War era toda una sorpresa.
Leer más: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/9-6731-2011-01-02.html
Ñ- revista de cultura, miércoles 5 de enero de 2011
"Mensajes para la posteridad (lingüística)" por Franco Torchia
En 2002, Fernando Aíta, Alejandro Güerri y Tomy Lucadamo se propusieron relevar los grafitis que albergan, con mayor o menor fugacidad, las paredes de Buenos Aires. Ahora, acaban de lanzar el sitio www.escritosenlacalle.com, con la evidencia de que no sólo de tecnología y nuevos medios se alimenta el cambio lingüístico.
Leer más: http://www.revistaenie.clarin.com/arte/Escrito_en_la_calle_0_403159906.html
Positivos.com: la red social del graffiti hispanoamericano (España)
"web ESCRITOS EN LA CALLE"
La esencia del graffiti es la calle. Lo podríamos decir así. Sin embargo, la única verdad es que no va a durar para siempre. El tiempo lo deteriora, puede volver a pintarse encima o, simplemente, el muro puede desaparecer físicamente si alguien decide derrumbarlo. Y entonces, ¿Qué pasa con el graffiti? ¿la obra se pierde?
Algo similar es lo que han pensado Alejandro Güerri, Fernando Aita y Tomy Lucadamo, promotores de la página ESCRITOSENLACALLE.COM, una página que recopila toda la muestra de arte urbano que se desarrolla en la ciudad de Buenos Aires.
Leer más: http://www.positivos.com/noticias_graffiti/web-escritos-en-la-calle1643
Woki Toki | prácticas artísticas
"Escritos en la calle"
Registro de grafitis y espacio urbano, desde Buenos Aires a la web.
Leer más: http://www.wokitoki.org/wk/621/escritos-en-la-calle
Agradecemos también a Conexión Moda, que eligió a GRaFiTi como sitio recomendado de diciembre, y a eBlog y la maja descalza (Venezuela) por republicar la nota del Radar.
En mayo partió la fotógrafa cordobesa Lucía Seguí. Tuve la suerte de conocerla en el Cineclub de Nono, que funcionaba en su casa. Su amigo Ruben De Noia, mi profesor de arquería, me prestó estas postales de sus graffitis cordobeses de los '80, que escaneé para compartir a modo de homenaje.
Desde 2016, Lean registra y publica pintadas callejeras como comentarios de la actualidad: así hace de una cuenta de Instagram las portadas de un diario "personal" al ritmo de la coyuntura.
En la noche del sábado 4 de julio en Constitución, por Virrey Ceballos al 1200 bajo la autopista, quemaron a una mujer dentro de la precaria casilla en la que vivía. No se logró reconocerla pero dicen que se llamaría Julieta. Un grupo anónimo realizó una acción en el lugar para velarla y ver si se puede restituir su nombre.
Atrás de la firma Desorden, se adivina una mano de mujer que convierte la O de la sílaba central en un corazón y combina el tag personal con letras de canciones ajenas. En calles de Uruguay, Chile, Argentina y en su cuenta de Instagram (@desordensenace), podrás ver sobre vidrios y paredes las múltiples aplicaciones de este tag que también muta traducido a otros idiomas. Es lo que pasa cuando el caos se vuelve sensible.
Nicolás Preci nació en 1983 en Buenos Aires. Es fotógrafo, viajero y autor de "Cacheños", una serie de fotos a gran escala de vecinos de Cachi, que pueden verse en las calles de este pueblo salteño desde hace varios meses.